La primera vez que Navas aparece en la prensa granadina

La primera mención que hemos encontrado del escultor José Navas Parejo en prensa escrita, es en el diario político independiente «El Defensor de Granada», cuando el artista aun no había cumplido los 15 años de edad, el 12 de junio de 1898. Esta noticia hace referencia a la Exposición de Bellas Artes que cada año se celebraba en Granada:
«Nuevas obras. Además de las obras que figuran en el catálogo que publicamos el jueves, se han recibido en nuestras oficinas y forman parte de la exposición, las siguientes:
Núm. 93 – El Dios Pan, alto relieve, de D. José Navas Parejo.
Núm. 94.- Dibujo, de D. Enrique Sánchez.»

Esta breve mención sobre la obra que presentó a dicha exposición, sería la predecesora de otras muchas que se sucederían en relación a este evento. Al menos, los primeros años de su formación.

La siguiente aparición en la prensa escrita de la ciudad que le vio crecer no se daría hasta dos años más tarde, en El Heraldo Granadino el 23 de junio de 1900. La noticia completa es la siguiente:

«Las fiestas del Corpus. Exposición de Bellas Artes

En la sección de Escultura figuran escasas obras.

Don José Navas Parejo, relieves en escayola de los Reyes Católicos, de la Reina Regente y don Alfonso XIII y un retrato de niña. Revela su autor completo dominio sobre este difícil arte.

Don Manuel Roldán de la Plata exhibe un grupo en barro, La propagación de la fé, que es un buen estudio.

Don Miguel Morales Marín, tiene tres obras:  Las hijas del Cid, Caridad y Atracción.

La primera es obra de empeño; dos grandes figuras al desnudo, en las que se notan incorrecciones tales como caras poco femeninas y durezas y líneas en las piernas, más propias del hombre que de la mujer.

Las otras dos obras son de menos pretensiones y de más mérito.

Don José Guerrero Lorenzo, un estudio de cabeza en bajo relieve.

Don Pablo Loyzaga, bajo relieves, Yedra, busto en escayola, retrato de León XIII y otro de Ganivet.

En general son muy apreciables estos trabajos.»

Días más tarde, el 3 de julio, el Defensor de Granada, publicaría los premios concedidos por el jurado a los participantes de la exposición:

El Defensor de Granada. 3 de Julio de 1900

El Defensor de Granada del 3 de julio de 1900 en la que Navas Parejo es nombrado como ganador de la mención honorífica de escultura en la Exposición de Bellas Artes de Granada

La Exposición

Ayer se reunió el Jurado de la Exposición de Bellas Artes e Industrias Artísticas, acordando la siguiente distribución de premios:

Sección de Escultura:

DIPLOMA DE PRIMERA CLASE: Las hijas del Cid, núm. 5, de D. Miguel Morales, Granada.

DIPLOMA DE SEGUNDA CLASE: Yedra, núm. 9, de D. Pablo Loyzaga, Granada.

DIPLOMA DE TERCERA CLASE: Propagación de la fe, núm. 4, de D. Manuel Roldán, Granada.

MENCIONES HONORÍFICAS: Retrato de niña, núm. 3, de D. José Navas, Granada.

Estudio de cabeza, núm. 8, de don José Guerrero Lozano, Granada.

(…)

Primera mención en la revista La Alhambra

La revista dedicada a las Artes y las Letras, se hacía eco cada año de las candidaturas a la Exposición de Bellas Artes. En el número de ese año le dedican un último párrafo, animándolo a continuar con su formación en la copia al natural de la escultura:

LA ALHAMBRA. REVISTA QUINCENAL DE ARTES Y LETRAS. AÑO III. Nº 62.  31 DE JULIO DE 1900

LA EXPOSICIÓN DE ESTE AÑO

II

No ha dejado de tener importancia la sección de Escultura. Han concurrido siete expositores con once obras, de verdadero interés artístico por diferentes razones.

Hay grupos desde lo monumental hasta el tamaño más pequeño; retratos en bajo relieve y un primoroso busto de estilo modernista.

Entre los grupos, uno, el más pequeño, revela  un artista que puede llegar a ser; refiérome al barro que se titula La propagación de la fe. Un misionero, predica la palabra de Dios a un pobre negro, cuyo achatado rostro va iluminándose al comprender las admirables doctrinas de Jesús. Las dos figuras merecen detenido estudio y singulares plácemes su modesto y joven autor D. Manuel Roldán de la Plata.

Entre los relieves presentados por otro joven, casi un niño, don José Navas Parejo, vale bastante el retrato de niña. El Sr. Navas debe de estudiar el natural, pues lo interpreta mucho mejor que las fotografías que le han servido para los relieves de los Reyes Católicos, la Regente y el Rey Alfonso XIII.


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